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Un litro de aceite contamina mil litros de agua 16-05-2017

Un litro de aceite contamina mil litros de agua
Lamentablemente, y aunque poco se sabe al respecto, el aceite (tanto de cocina como el aceite industrial) es uno de los elementos más contaminantes y nocivos con el medio ambiente.

El aceite es un material difícilmente degradable y suele formar una película impermeable en la superficie de los ríos, lagos o mares donde es desechada por las respectivas redes de alcantarillas.  Esta película se formará siempre, incluso cuando vertemos el aceite en el desagüe de la cocina o el baño sin tener conciencia sobre lo que esto implica.
 
El mayor problema del aceite es que además de contaminar el agua forma una película impermeable que imposibilita el intercambio de oxígeno. ¿Cuál es el resultado? El agua comienza a descomponerse. Si a esto sumamos el detalle de que un solo litro de aceite logra contaminar mil litro de agua estamos ante una situación de suma urgencia y cuidado.
 
En el caso del aceite usado de motor (no es el aceite comestible y contiene metales como ser plomo, manganesio o cadmio) el peligro es mayor. Este tipo de aceite no contamina mil litros de agua sino muchos más. Por ejemplo, unos pocos litros de aceite de motor generan enormes manchas en el agua. El mar, por ejemplo, puede tomarse hasta casi 20 años en limpiar este tipo de residuos.
 
¿Qué hacer, entonces, con el aceite usado?

 
La buena noticia es que el aceite puede ser reciclado. De este modo, no sólo evitamos contaminar nuestro medio ambiente sino que también reaprovechamos este material. El aceite puede reutilizarse como biocombustible, jabón graso o como fertilizante.  Por lo cual, el mal tratamiento del aceite no solo atenta contra la naturaleza y el ambiente sino que también es un desperdicio importante ya que cada litro de aceite usado puede reciclarse.
 
El aceite usado no debe tirarse ni al agua ni a la tierra (puede arruinar el humus natural y deteriorar la fertilidad del suelo). Lo mejor es almacenarlos en botellas de plástico o vidrio y llevar estas a centros de recogida y reciclado.
 
En caso de aceites industriales o aceites de cocina en grandes cantidades (hoteles, restaurantes o bares) lo mejor que se puede hacer es contactarse con una empresa de recogida y tratamiento de este tipo de residuos. De esto modo, también, evitamos multas y penalizaciones por la mala gestión de los residuos. A su vez, el aceite mal tratado puede generar incendios, derrames y malos olores. El problema se incrementa a la hora de desagotar las cañerias, lo cual se traduce en perdida de tiempo y dinero.  
 
La gestión de residuos no es más que un ciclo que debe comenzar y cerrarse de una manera responsable.
                                                                                           
Si tenés dudas sobre la gestión de tus residuos, consultanos.
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